Los testigos de León

El sábado pasado fuimos nuevamente a competir en el Impro Sport Argentina, el único campeonato argentino que enfrenta compañías de impro a través de la impro y que el año pasado supimos obtener, pero esta vez, nos quedamos con las ganas.
Enfrente teníamos unos magníficos rivales, Los Testigos de Johnstone, improvisadores con gran experiencia y trayectoria que buscaban la revancha del año pasado cuando los superamos en octavos de final.
Esta vez eran las semifinales y ellos venían afilados, después de superar en la fase de grupos con absoluta superioridad a sus rivales llegaron al No Avestruz (Teatro/Estadio donde se disputa el torneo) envalentonados y con el apoyo de mucha gente que los acompañó, nosotros también teníamos a los nuestros, el marco era el ideal, se venía un gran partido.
Y asi fue, un excelente y gran partido, parejo, peleado, vertiginoso y divertido, dimos todo y ellos dieron todo hasta que llegó el final y quedamos empatados, se tenía que definir en un último desafío y ahora era el momento difícil, pero para el público, porque en la cancha las dos compañías demostramos algo que no muchas veces se ve, que la impro se construye en equipo y no hablo de dos equipos, sino de uno solo, el sábado en el No Avestruz la gente vio a Los Testigos de León o Abel Sanchez de Johnstone, como quieran llamarlo, pero vieron a 6 improvisadores dar todo en una competencia deportiva valorando y poniendo por encima lo que más importa, la impro.
El voto del público fue para ellos, nosotros nos quedamos en las puertas de una nueva final con el gusto amargo de la derrota pero el dulce sabor de la impro, ahora el objetivo es mayor, seguir improvisando, seguir creciendo y esperar la revancha, porque todavía hay mucho más para dar, hay Abeles para rato, salú!